Clínica Dental Lozano

Causas del mal sabor de boca

¿Alguna vez te has despertado por la mañana con un sabor desagradable en la boca o has experimentado un persistente sabor amargo o metálico? Este síntoma puede afectar nuestra calidad de vida y hacernos sentir incómodos.

  • Problemas dentales: La mala higiene oral, las infecciones en las encías, las caries o la acumulación de placa bacteriana pueden ser responsables del mal sabor en la boca. Es importante mantener una buena rutina de cuidado bucal, incluyendo el cepillado adecuado, el uso de hilo dental y visitas regulares al dentista para prevenir y tratar estos problemas.
  • Infecciones en la boca: Las infecciones bucales, como la candidiasis oral (infección por hongos) o la gingivitis (inflamación de las encías), pueden causar un sabor desagradable. Si sospechas que tienes una infección, es importante que consultes con nuestros profesionales especializados en salud bucal para recibir el tratamiento adecuado.
Causas principales del mal sabor de boca
  • Problemas gastrointestinales: El reflujo ácido, la gastritis o la enfermedad del reflujo gastroesofágico (ERGE) pueden provocar un sabor amargo o ácido en la boca. Estas condiciones pueden causar el retorno del ácido estomacal hacia el esófago y la boca, lo que resulta en un mal sabor persistente. Si sospechas que tu mal sabor de boca está relacionado con problemas gastrointestinales, es recomendable que consultes a un médico especialista.
  • Medicamentos: Algunos medicamentos pueden tener efectos secundarios que incluyen un mal sabor en la boca. Antidepresivos, antibióticos, medicamentos para la presión arterial o para el tratamiento del cáncer son solo algunos ejemplos. Si experimentas un mal sabor de boca después de comenzar un nuevo medicamento, habla con tu médico para evaluar si es posible ajustar la dosis o cambiar a otra opción.
  • Deshidratación: La falta de hidratación adecuada puede provocar sequedad bucal y, a su vez, un sabor desagradable. Asegúrate de beber suficiente agua a lo largo del día para mantener una buena hidratación y estimular la producción de saliva, que ayuda a neutralizar los ácidos y mantener la boca fresca.
  • Tabaco y alcohol: Fumar y beber alcohol en exceso pueden contribuir a un sabor desagradable en la boca. Estos hábitos pueden irritar las encías y alterar el equilibrio de la flora oral, lo que lleva a un mal sabor persistente. Considera reducir o eliminar el consumo de tabaco y alcohol para mejorar tu salud bucal y general.
 

Si experimentas síntomas persistentes tales como los comentados anteriormente ponte en contacto con nuestra clínica dental Córdoba y ponte en mano de dentistas especializados en salud bucodental .

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